El pasado mes de octubre volvimos a volar en la capital de Granada para realizar un spot para Integrate Media. Además, aprovechamos para grabar unas tomas aéreas del la Alhambra. El servicio de imágenes aéreas estaba destinado a un anuncio para la empresa de reparto y mensajería VAYVEN. Para este trabajo aéreo volvimos a contar con el pequeño Mavic 2 Pro. Es sin duda el mejor dron para este tipo de servicios en núcleo urbano. Tanto sus características de vuelo como sus sensores de proximidad lo hacen el especialista para volar en ciudad.
Agradecer nuevamente al Policía Especialista en Seguridad y Protección Aérea por su magnífico trabajo y a la Policía Local de Granada su gran ayuda y colaboración. Gracias a ellos pudimos realizar las magnificas imágenes aéreas de la Alhambra.
Todo este servicio ha sido posible gracias al esfuerzo y coordinación con: Centro Cartográfico y Fotográfico del Ejército del Aire (CECAF). Helipuerto del Hospital Universitario de San Cecilio. ALA78-Base Aérea de Armilla.
Un poquito de historia:
«La Alhambra, denominada así por sus muros de color rojizo («qa’lat al-Hamra’», Castillo Rojo). Está situada en lo alto de la colina de al-Sabika al este de la ciudad, frente a los barrios del Albaicín y de la Alcazaba.
Su posición estratégica hace pensar que existían construcciones anteriores a la llegada de los musulmanes. Su conjunto posee una forma irregular limitado al norte por el valle del Darro, al sur por el de la al-Sabika, y al este por la Cuesta del Rey Chico. A su vez la separan del Albaicín y del Generalife, situado en el cerro del Sol.
Se tiene constancia por primera vez de ella en el siglo IX Sawwar ben Hamdun tuvo que refugiarse en la Alcazaba y repararla debido a las luchas civiles que azotaban por entonces al Califato cordobés. Posteriormente, este recinto empezó a ensancharse y a poblarse. Los primeros monarcas ziríes fijaron su residencia en lo que posteriormente sería el Albaicín.
A pesar de la incorporación del castillo de la Alhambra al recinto amurallado de la ciudad en el siglo XI, lo que la convirtió en una fortaleza militar desde la que se dominaba toda la ciudad, no sería hasta el siglo XIII con la llegada del primer monarca nazarí Mohamed ben Al-Hamar (Mohamed I, 1238-1273) cuando se fijaría la residencia real en la Alhambra. Este hecho marcó el inicio de su época de mayor esplendor.
Primero se reforzó la parte antigua de la Alcazaba, y se construyó la Torre de la Vela y del Homenaje, se subío agua del río Darro, se edificaron almacenes, depósitos y comenzó la construcción del palacio y del recinto amurallado que continuaron Mohamed II (1273-1302) y Mohamed III (1302-1309), al que también se le atribuyen un baño público y la Mezquita sobre la que se construyó la actual iglesia de Santa María.
A Yusuf I (1333-1353) y Mohamed V (1353-1391) les debemos la inmensa mayoría de las construcciones de la Alhambra que han llegado a nuestra época. Desde la reforma de la Alcazaba y los palacios, pasando por la ampliación del recinto amurallado, la Puerta de la Justicia, la ampliación y decoración de las torres, construcción de los Baños y el Cuarto de Comares, la Sala de la Barca, hasta el Patio de los Leones y sus dependencias anexas. De los reyes nazaríes posteriores no se conserva prácticamente nada.
De la época de los Reyes Católicos hasta nuestros días podemos destacar la demolición de parte del conjunto arquitectónico por parte de Carlos V para construir el palacio que lleva su nombre, la construcción de las habitaciones del emperador y el Peinador de la Reina y el abandono de la conservación de la Alhambra a partir del siglo XVIII. Durante la dominación francesa fue volada parte de la fortaleza y hasta el siglo XIX no comenzó su reparación, restauración y conservación que se mantiene hasta la actualidad.»
FUENTE: https://www.alhambradegranada.org/